Breve reseña biográfica de Tomás Díaz Díaz,
un royano en los altares de la Iglesia Católica.
un royano en los altares de la Iglesia Católica.
“Por la cruz he entrado en
la Orden y por la cruz quiero morir”
-del contenido textual-.
Consideraciones
previas.
El sábado, día 21 de noviembre de 2015, fue canonizado en
la catedral de Barcelona fray Buenaventura de Arroyo Cerezo, alias
religioso de Tomás Díaz Díaz (1913-36), natural de Arroyo Cerezo, aldea de
Castielfabib (Valencia). El acto de beatificación comenzó a las 11:30 horas,
fue presidido por el cardenal Angelo Amato -prefecto de la Congregación para
las Causas de los Santos-: la misa fue concelebrada por el cardenal arzobispo,
Lluis Martínez Sistach, y contó con la presencia de sobrinos y sobrinos-nietos
del royano. Junto con fray Buenaventura fueron beatificados otros veinticinco
religiosos compañeros suyos, de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos (Ordo Fratum Minorum Cappuccinorum, abreviado OFMCap),
asesinados en el mismo momento histórico.
El proceso de canonización de nuestro coterráneo se
reactivó hace unos años, por iniciativa de familiares del bienaventurado ante el Arzobispado de Barcelona (2000). Sin embargo, las primeras noticias respecto a la apertura del proceso de beatificación o declaración de martirio aparecidas en la prensa datan de marzo de 1957 y julio de 1958 (La Vanguardia Española).[1] Tras un
largo proceso, el Papa Francisco, con fecha 6 de junio de 2015, autorizó a la
Congregación para las Causas de los Santos promulgar el decreto de reconocimiento
del martirio de fray Buenaventura, y de sus compañeros de Orden.
El propósito de la entrada es dar a conocer la existencia
del personaje, asesinado “in odium fidei” en los primeros momento de la
revolución y guerra civil española (1936-39). Su asesinato tuvo lugar en La
Verneda de Barcelona, en el contexto de la persecución religiosa que padeció la
Iglesia Católica en España, según recoge Montero Moreno en su obra: "Buenaventura de Arroyo-Cerezo, F., Ca-/ puchino convento de Sarriá; + Barcelona, 25-7-36".[2]
Partida de
nacimiento de Tomás Díaz Díaz.
1913, marzo 8. Castielfabib (Valencia).
Asunto: Acta de nacimiento de Tomás Díaz Díaz,
hijo de Francisco y de Francisca, ambos residentes y vecinos de la villa de
Castielfabib (Valencia).
Ubicación: Archivo Municipal, Registro Civil de
Castielfabib, Libro de Nacimientos, Año 1913, número 176, folio 176r-v.
Trascripción literal:
- En Castielfabib á las once horas del/ día ocho de Marzo/ de mil novecientos trece, ante D. Ramón/ Esparza Bea, Juez municipal/ y D. Emilio Jarque Casino Secretario,/ compareció Ventura Díaz/ natural de esta Villa, de estado/ casado/ con el objeto de que se inscriba en el Registro civil un niño/ y al efecto como abuelo del mismo/ declaró:/ Que dicho niño nació en su propio/ domicilio á las diez y nueve horas/ del día anterior./ Que es hijo legítimo de Francisco Díaz Martín y Francisca Díaz y/ Monleón, ambos de esta Villa y de/ veintisiete y veinticuatro años/ respectivamente./ Que es nieto por línea paterna de Francisco Díaz/ Villalba, y María Martín Este-/ban de esta Villa y del/ Cuervo respectivamente./ (fol. 176v) Y por línea materna de Buenaventura Díaz Díaz y Tomasa Mon-/ león y Díaz, de esta Villa./ Y que á expresado niño se le puso por nombre/ Tomás./ Leída íntegramente esta acta é invitadas las personas que deben sus-/ cribirla á que la leyeran por sí mismas si así lo creían conveniente, se/ estampa en ella el sello del Juzgado municipal, y la firman el Sr. Juez/ no el declarante por no saber/ los testigos que/ suscriben/ y de todo ello, como Secretario, certifico./ Por sí y á ruego/ del declarante: Godofredo Tomás./ Emilio Jarque./ Ramón Esparza./ Testigos: Pelayo Fornas./ Constantino González./ [Junto a las firmas y signaturas de los intervinientes en la inscripción figura el sello del Registro Civil Municipal].
Líneas familiares de
Tomás Díaz Díaz, de Arroyo Cerezo-Castielfabib (1913-1936).
Nombre y apellidos
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padres
|
Abuelos
|
|
Paternos
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Maternos
|
||
Tomás Díaz Díaz
(Arroyo Cerezo-Castielfabib, 1913-Barcelona, 1936)
|
Francisco Díaz Martín
(de Castielfabib)
Francisca Díaz Monleón
(de Castielfabib)
|
Francisco Díaz Villalba
(de Castielfabib)
María Martín Esteban
(de El Cuervo)
|
Buenaventura Díaz Díaz
(de Castielfabib)
Tomasa Monleón Díaz
(de Castielfabib)
|
Archivo Municipal de Castielfabib (Valencia), Registro
Civil, Libro de Nacimientos, año 1913, Acta nº 176, fol. 176r-v. Elaboración
propia (2016).
Vista general (meridional) de Arroyo Cerezo-Castielfabib (Valencia), lugar de nacimiento de Tomás Díaz Díaz (1913-1936), beatificado como fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (2015). |
Vista general (meridional) de Arroyo Cerezo-Castielfabib (Valencia), lugar de nacimiento de Tomás Díaz Díaz (1913-1936), beatificado como fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (2015). |
Breve reseña
biográfica de Tomás Díaz Díaz, alias fray Buenaventura de Arroyo Cerezo.
El Acta de Nacimiento de Tomás Díaz Díaz dice que fue su
abuelo, “Ventura Díaz”, esto es, Buenaventura Díaz, quien se persono en el
Registro civil de la villa para inscribir su nacimiento, manifestando que el
niño objeto de inscripción “nació en su propio domicilio” (entendemos que en la
casa de sus padres), y que el alumbramiento tuvo lugar a las “diecinueve horas
del día anterior” a la inscripción, esto es, a las siete de la tarde del día 7
de marzo de 1913.
El registro refiere que el nacimiento tuvo lugar en la
segunda década del siglo XX (1913), fecha en que el Rincón de Ademuz estaba a
punto de alcanzar su clímax poblacional: en 1910 la comarca censaba 10.943
habitantes de los cuales 2.614 se hallaban en Castielfabib; en 1920, censaba
11.194 hab., de los cuales 2.393 se hallaban en Castielfabib. En la década
siguiente (años treinta), la zona comenzó a perder población de forma
prácticamente ininterrumpida, hasta la actualidad. El despoblamiento se explica
-en parte- por el exceso de población y el agotamiento de los recursos
tradicionales.[3]
La genealogía de Tomás Díaz Díaz demuestra que su
ascendencia inmediata procede casi en su totalidad de la zona del Rincón de
Ademuz, concretamente del municipio de Castielfabib, donde todavía pueden
encontrarse sus apellidos, y de la vecina villa de El Cuervo (Teruel), pueblo
aragonés situado aguas arriba del Ebrón, lugar de nacimiento de su abuela
paterna.
Vista de una casa tradicional de Arroyo Cerezo-Castielfabib (Valencia), con detalle del típico porche (2015). |
Vista de una casa tradicional de Arroyo Cerezo-Castielfabib (Valencia), con detalle del típico porche (2015). |
Otro dato de interés puede verse al final del documento,
cuando los copartícipes en el acto de inscripción firman el acta (Juez,
Secretario y testigos), “no el declarante por no saber”. Ello indica el grado
de instrucción del abuelo materno, señor Ventura Díaz, que no sabía firmar, ni
probablemente leer. El hecho, aunque convenga reseñarlo, no es una anomalía;
por el contrario, es relativamente frecuente encontrar actas de esa fecha y
posteriores, en las que los declarantes y testigos son iletrados. Es de
pensar que el bautismo del niño Tomás tendría lugar en la iglesia parroquial San
Joaquín y Santa Bárbara, aunque la partida de Bautismo no se ha conservado,
por haberse destruido durante la revolución (1936), cuando la iglesia local,
víctima de lo que se ha denominado “martirio de las cosas”, fue saqueada.[4]
Al niño se le impuso el nombre de “Tomás”, quizá en recuerdo de su abuela
materna, Tomasa Monleón Díaz. Lo propio hubiera sido ponerle el nombre del
padre o de los abuelos (Francisco o Buenaventura), al menos esa era la
tradición local, pero quizá lo llevaban ya otros hermanos, o hubo otras
razones.
Vista parcial de Arroyo Cerezo-Castielfabib (Valencia), con detalle de La Muela y el Campo de Royo al fondo (2015). |
La fecha de nacimiento del niño Tomás Díaz Díaz, al comienzo de la segunda década del siglo XX, nos invita a pensar en cómo sería la aldea de Arroyo Cerezo entonces, un lugarcito formado por dos o tres grupos de casas –el barrio de Abajo, el barrio de Enmedio y el de la Casilla (o de Arriba)-, sito en la margen derecha del Regajo, en las estribaciones del cerro de La Loma y Campo del Royo. El núcleo urbano, sito en las proximidades de la Cruz de los Tres Reinos,[5] en los confines de Castielfabib, entre Aragón y Castilla, sólo se hallaba comunicado entonces por caminos de herradura. La carretera CV-483 que actualmente comunica la aldea con la N-420 permaneció como camino hasta la Guerra Civil (1936-1939), entonces se engravó desde el empalme hasta Veguillas de la Sierra (Teruel). Aunque la aldea tuvo luz eléctrica en la inmediata posguerra, proveniente de una central de Salvacañete (Cuenca), muy deficiente y discontinua, el actual tendido eléctrico no se llevó a cabo hasta los años ochenta (1980-1981). Asimismo, el agua corriente no llegó a las casas del lugar hasta la segunda mitad de los años setenta (1977).
Las reseñas biográficas consultadas dicen que la familia
de Tomás, al poco del nacimiento de éste se trasladó a Los Santos, aldea de
Castielfabib sita al sur de la villa, en la margen izquierda del
río Ebrón o de Castiel. ¿Qué llevó a la familia Díaz Díaz a trasladarse
de Arroyo Cerezo a Los Santos? No lo sabemos con certeza, pero fácilmente
podemos intuir que fue porque en su aldea natal la familia carecía de recursos,
tal vez no poseía suficientes medios de vida, el padre debía ser jornalero o
bracero..., siendo estos los motivos que impulsaron a la familia a migrar.
Vista parcial (meridional) de Los Santos-Castielfabib (Valencia), lugar donde primero migró la familia de Tomás Díaz Díaz (1913-36), antes de marchar a Barcelona (2015). |
Vista general (meridional) de Los Santos-Castielfabib (Valencia), lugar donde primero migró la familia de Tomás Díaz Díaz (1913-36), antes de marchar a Barcelona (2015). |
La citada reseña biográfica dice que “con 13 años (Tomás)
marchó a Barcelona”, donde “vivió pobremente con su padre”, de donde puede
deducirse que los que emigraron a la ciudad condal desde Los Santos, al menos
en un primer momento, fueron Tomás y su padre, el señor Francisco. La madre,
señora Francisca -y quizá otros hijos- se quedaron en la aldea. Esto fue hacia
1926, en plena Dictadura de Primo de Rivera, un momento crucial del desarrollo
económico del país en que hubo mucho trabajo en Barcelona por las obras
públicas realizadas entonces. Muchos vecinos del Rincón de Ademuz y pueblos del
entorno comarcal de Cuenca y Teruel se marcharon por entonces a Cataluña. Uno de
ellos fue Francisco Candel Tortajada (Casas Bajas, 1925-Barcelona, 2007), que emigró con
su familia a Barcelona en 1927, cuando el futuro escritor apenas contaba 2
años.[6]
Según una nota de prensa consultada, para cursar
estudios, Tomás ingresó en el Seminario Menor, y después en el Mayor de "Les
Corts": desde aquí cada día iba al Seminario Conciliar de Barcelona, situado
en la calle Diputación: “Tomás, que va aprovar els quatre cursos de llatí, en
temps de vacanses tornava al seu poble”. Propiamente, sin embargo, resulta poco
creíble que Tomás regresara a Los Santos o Arroyo Cerezo durante las
vacaciones. Hemos de pensar que el viaje desde Barcelona era largo y costoso, y
la economía familiar no debía ser tan boyante como para permitírselo. Aunque
esto es sólo un apunte crítico...
Estando en el Seminario Menor, Tomás manifestó al
confesor de la institución -fray Esteve de la Garriga-, su deseo de ser
fraile capuchino. Los Hermanos Menores Capuchinos (OFMCap) constituyen una reforma de los franciscanos Observantes de los primeros tiempos (espirituales); respecto del hábito, portan el mismo que los franciscanos (marrón ceñido con cordón), con una característica capucha unida a la túnica, de ahí que se les conozca como "capuchinos". De esta forma, siguiendo con la cronología establecida por la
Delegación para las Causas de los Santos del Arzobispado de Valencia, cuando
Tomás tenía 17 años –esto fue el 21 de septiembre de 1930- “tomó el hábito
capuchino en Manresa”, “y profesó temporalmente al año siguiente en Arenys de
Mar” –esto fue el 26 de septiembre de 1931, cuando contaba 18 años-: de esta
época data el cambio de su nombre civil –Tomás Díaz Díaz- por el religioso de Buenaventura
de Arroyo Cerezo. Como es sabido, los capuchinos, como los franciscanos de la Observancia (OFM) cambian su
nombre de pila por otro de la tradición religiosa, al que añaden su lugar de
nacimiento. El nombre religioso de Tomás no fue tomado al albur, ya que su
abuelo materno portaba este nombre: Buenaventura Díaz Díaz, alias Ventura.
Un nombre que entronca también con el del santo y místico franciscano Buenaventura
de Fidenza, figura señera de la espiritualidad franciscana, proclamado
doctor de la Iglesia Católica en 1588.
Tras la profesión temporal en el convento de su Orden en
Arenys de Mar, Tomás cursó Filosofía en Olot (Gerona), y después Teología, esta
última asignatura entre Sarriá (Barcelona) y Palma de Mallorca, al tiempo que
cumplía el servicio militar.
Sin embargo, “la profesión solemne” no la emitió Tomás
hasta varios años después, en mayo de 1936, cuando tenía 23 años, al tiempo que
recibía las Ordenes Menores en el convento de Sarriá. El comienzo de la Guerra
Civil le cogió “terminando el segundo curso de Teología”. Al día siguiente del
levantamiento militar derechista, el Padre Guardián del convento de Sarriá, a
la sazón fray Benigno de Canet, envió a todos los frailes estudiantes,
entre los que se hallaba fray Buenaventura, a dormir fuera del convento
–seguramente por temor a la persecución religiosa que comenzó entonces,
manifiesta en el ambiente anticlerical que se respiraba en la ciudad, en la
detención de clérigos y en la quema de iglesias y conventos-: Inicialmente fray
Buenaventura fue acogido en el Seminario Menor de "Les Corts".
Propiamente, sin embargo, el lugar no era seguro, razón por la que un familiar
le buscó otro sitio de más confianza y seguridad: Primero estuvo en una casa
del barrio de Gracia, pero acabó escondiéndose en otra de la calle de la
Sagrera, propiedad de los señores Miró. Allí debió estar varios días o semanas,
mostrándose siempre efusivo con todo el mundo, incluso locuaz, aunque sin
olvidar su tiempo de retiro y oración -pues estos frailes estiman particularmente el estudio y la vida contemplativa-.
Detalle del convento de los Hermanos Menores Capuchinos (OFMCap) de Manresa (Barcelona), ardiendo durante la revolución (1936). |
Detalle de la fachada de la iglesia del convento de los Hermanos Menores Capuchinos (OFMCap) de Manresa (Barcelona), s/f. |
Para evitar la persecución, a fray Buenaventura se le
sugirió que renunciara a la vida religiosa, cosa que no aceptó. Por el
contrario, consta que respondió al amigo que se lo había aconsejado: “Jo no ho
deixe. I si em maten, què millor que donar la vida pel Crist”. La cita proviene
de un artículo en catalán o valenciano, aunque desconozco si el fraile hablaba dicho idioma: lo más probable, sin embargo, es que lo entendiera, y que tuviera el acento propio de esa zona de España, tan pegadizo.
Como era de prever en aquel contexto histórico, varias
casas de la zona donde se hallaba refugiado fray Buenaventura fueron objeto de
registro, entre ellas la de los señores Miró -esto sucedió el 24 de agosto de
1936-. En el curso del registro efectuado por los milicianos, y con tal de evitar
su detención, el fraile manifestó ser “novici equatorià”. Pero al parecer, sus
rasgos físicos y manera de hablar evidenciaban que no era de aquella
nacionalidad, razón por la que fue detenido, junto con su protector, el señor
Miró. Reconociendo su error, el capuchino pidió perdón a sus captores, por
haber intentado engañarles. Manifestó también que su mentira había sido
producto del desasosiego ante la situación, al tiempo que se puso a defender la religión, lo
que provocó una discusión con los milicianos anarquistas que le había
arrestado.
En el curso de la discusión con sus aprehensores, fray
Buenaventura fue acusado “de ser contrari al proletariat pel fet de ser
religiós”. Ante semejante acusación, el detenido respondió: “No tinc por. Si he
de donar la vida per millorar la sort de la humanitat o les condicions de vida
dels treballadors, l`oferisc gustosament”. El religioso fue golpeado por los
milicianos, para obligarle a blasfemar, instándole a que les entregara una
cruz que portaba, a lo que respondió: "Per la cre he entrat a l`Orde i per la
creu vull morir” -palabras que constituyen el lema de su persona, y la rúbrica
de su martirio-.
Al día siguiente de su detención, fray Buenaventura fue conducido de madrugada a la
carretera de La Verneda, donde recibió el martirio. Antes de su
ametrallamiento, pues su cuerpo apareció al día siguiente acribillado a
balazos, consta que dijo: "Podeu matar-me però soc inocent i done la vida per
Déu”. Murió pronunciando un ¡Viva Cristo Rey!: el hecho tuvo lugar el 25 de
agosto de 1936. La Verneda y la Paz es un barrio de Barcelona, actualmente
integrado en el distrito de San Martín, entonces zona de descampado ocupada por
terrenos de cultivo y algunas masías.
Otros
capuchinos canonizados junto a fray Buenaventura de Arroyo Cerezo.
Junto a nuestro coterráneo, el royano Tomás Díaz Díaz,
alias fray Buenaventura de Arroyo Cerezo, en el mismo acto religioso fueron
canonizados otros frailes, miembros de su Orden:
Agustí de Montclar, Alejandro de Barcelona, Ángel de
Ferrerías (hermano laico), Anselmo de Olot, Benigno de Canet de Mar, Cebrià de
Tarrasa, Doroteo de Vilalba, Edualdo de Igualada, Eloy de Vianya, Federeico de
Berga, Félix de Tortosa, Jordi de Santa Pau, Josep de Calella de la Costa, Marçal
de Villafranca del Penedés, Martí de Barcelona, Miguel de Bianya, Modesto de
Mieres, Paciá María de Barcelona, Prudencio de Pomar de Cinca, Rafael María de
Mataró, Remigio de Papiol, Tarsicio de Miralcamp, Timoteo de Palafrugell,
Vicente de Besalú, y Zacarías de Sant Llorenç del Penedés.
Palabras
finales, a modo de epílogo.
La historia de Tomás Díaz Díaz (1913-36), fray Buenaventura de
Arroyo Cerezo, es la de un royano elevado a los altares de la Iglesia
Católica, merced a su martirio, que tuvo lugar en el contexto del genocidio
religioso habido en la España republicana controlada por el Frente Popular
durante la revolución y Guerra Civil (1936-39).
La vida de Tomás corresponde a la de un niño nacido en
Arroyo Cerezo, una humildísima aldea de Castielfabib, en el seno de una familia
pobre, como las habría tantas en aquella época -segunda década del siglo XX
(1913)- en el Rincón de Ademuz. Tan escasos debían ser sus medios de vida que la
familia decidió migrar a Los Santos, otra aldea de la Villa aguas abajo del Ebrón, con mejores perspectivas
que la suya, pero aldea al fin.
Tras esta primera migración, la familia decide emprender
una aventura mayor, la de la emigración a una gran ciudad, como lo era ya
Barcelona en los años veinte del pasado siglo. En un primer momento, marcharon
el niño Tomás y su padre, el señor Francisco. Parece que el resto de la familia
quedó en la aldea, a la espera de cómo fuera la experiencia migratoria del cabeza
de familia y el hijo. La vida de nuestro coterráneo constituye pues el paradigma
de tantas otras familias que emigraron del campo a la gran urbe, dejando atrás la vida
rural y el mundo campesino.
El joven Tomás manifestó pronto su deseo de
ser religioso, tal vez influido por el ambiente del seminario Menor en el que
tenía lugar su formación, ya fuera por sus circunstancias de vida o particular sensibilidad
espiritual. Al comienzo de la década de los treinta , siguiendo la tradición
capuchina, Tomás pasa a ser fray Buenaventura de Arroyo Cerezo,
sobrenombre religioso compuesto por el nombre propio del señor Ventura, su abuelo materno y el de
su lugar de nacimiento –en cualquier caso, un nombre bellísimo que le conecta con sus raíces-.
El estallido de la guerra y la persecución religiosa desatada entonces le
cogió estudiando segundo año de Teología -vistiendo ya el hábito capuchino-:
tuvo que buscar amparo en varias casas particulares, siendo detenido en la
segunda donde halló refugio. Los milicianos anarquista que le detuvieron le
maltrataron con el propósito de que blasfemara, intimándole a que entregara la
cruz que portaba. Su martirio tuvo lugar al día siguiente de su detención, en el
barrio barcelonés de La Verneda -durante la madrugada del 25 de agosto de 1936-: tenía 23 años.
Propiamente, Fray Buenaventura de Arroyo Cerezo es
uno de los 5.727 religiosos (clero secular y regular incluido) asesinados entre julio y
diciembre de 1936 en España, y el primero de los nacidos en el Rincón de Ademuz
elevado a los altares. ¡Beato Buenaventura de Arroyo Cerezo, ruega por nosotros! Vale.
De la Real Academia de Cultura Valenciana (RACV).
ADENDA:
La Asociación Cultural San Marcos de Los Santos (Castielfabib, Valencia), ha colocado en la fachada de la casa donde vivió de niño Tomás Díaz Díaz (fray Buenaventura de Arroyo Cerezo), fray capuchino natural de Arroyo Cerezo, pedanía de Castielfabib (Valencia). El texto del plafón cerámico dice:
En este lugar vivió desde 1913 a 1926 el
Beato
Buenaventura de Arroyo Cerezo
Tomás Díaz Díaz
(Arroyo Cerezo (Valencia) 31/III/1913-Barcelona 25-VIII/1936
Beatificación el 21/XI/2015
Asociación Cultural San Marcos - Los Santos (Valencia) 2017
Plafón cerámico en la fachada de la casa de Los Santos (Castielfabib, Valencia), donde vivió de niño fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (2018). |
Calle del Remedio de Los Santos (Castielfabib, Valencia), con detalle de la casa donde vivió de niño fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (2018). |
Calle del Remedio de Los Santos (Castielfabib, Valencia), con detalle de la casa donde vivió fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (2018). |
[1] LA VANGUARDIA ESPAÑOLA: Vida de Barcelona, Crónica de la jornada: Sesión solemne y pública de apertura del proceso de beatificación o declaración de martirio de veintiseis religiosos capuchinos de la Provincia monástica de Cataluña y Baleares, del miércoles 27 de marzo de 1957, p. 20. ID. Declaración de martirio de los Siervos de Dios P. Federico de Berga y Compañeros: Fueron capuchinos profesos de la provincia de Nuestra Señora de Montserrat, de Cataluña y Baleares, del sábado 12 de julio de 1958, p. 19.
[2] MONTERO MORENO, Antonio. Historia de la persecución religiosa en España, 1936-1939, BAC, Madrid, 1998 (1ª Edición 1961), p. 784.
[3] SÁNCHEZ
GARZÓN, Alfredo. El Rincón de Ademuz agoniza, en el sitio web Desde el Rincón de Ademuz, del martes 15 de diciembre de 2015.
[4] ID (2011). El
expolio de las iglesias y ermitas de Castielfabib durante la revolución, con
detalle de los daños, en Del paisaje, alma del Rincón de Ademuz,
Valencia, vol. IV, pp. 317-327. ID. Antonio Díaz Díaz (a) Antonino, natural y vecino de Arroyo Cerezo (Castielfabib), en el sitio web Desde el Rincón de Ademuz, del domingo 17 de abril de 2016.
[5] ID. La Cruz de los Tres Reinos, historia y mito en el paisaje, en el sitio web Desde el Rincón de Ademuz, del miércoles 15 de octubre de 2014.
[6] SÁNCHEZ
GARZÓN, Alfredo (2000). Francisco Candel Tortajada, un catalán de
Casas Altas, en Desde el Rincón de Ademuz, Valencia, pp. 183-187.
ID. Francisco Candel, un catalán de Casas Altas, en el sitio web Desde el Rincón de Ademuz, del viernes 6 de junio de 2014. ID. Casas Altas homenajea a Francisco Candel, en el sitio web Desde el Rincón de Ademuz, del viernes 5 de junio de 2015.
Bibliografía
consultada en el web:
-- ARCHIDIÓCESIS DE VALENCIA: Un fraile valenciano es beatificado en la catedral de Barcelona junto a 25 mártires de 1936,
del viernes 20 de noviembre de 2015 (Consultada el 20 de abril de 2016).
-- AYUNTAMIENTO DE CASTIELFABIB: Fray Buenaventura de Arroyo Cerezo (Marzo 1913-Agosto 1936),
del 21 de noviembre de 2015.
-- ESGLÉSIA DE
BARCELONA ARCHIDIOCESANA: Beatificación de veintiséis frailes mártires de la Orden de los Capuchinos
(Consultada el 20 de abril de 2016).
-- HISPANIA MARTIR: Mártires de la persecución religiosa en España en el siglo XX: Noticiario Martirial (Consultada el 20 de abril de 2016).
-- LEVANTE-EL MERCANTIL VALENCIANO: Comarcas: Un fraile de Castielfabib será beatificado hoy en la catedral de Barcelona,
del 21 de noviembre de 2015. 21 de novembre: Fra Bonaventura d´Arroyo Cerezo, 21 de noviembre de 2015.
-- SERVICIO DE INFORMACIÓN CATÓLICA (SIC): Comisión
Episcopal de Medios de Comunicación: Un fraile valenciano será beatificado este sábado en la catedral de Barcelona junto a 25 mártires de 1936,del 20 de noviembre de 2015.
ANEXO DOCUMENTAL Y GRÁFICO:
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