A propósito de una visita al
lugar hidrológico.
“Abundan
asimismo las aguas potables en las espresadas aldeas,
y
los vecinos de la villa se surten de la que brota por 4 caños
de
la fuente del Molino”
-Madoz, Diccionario Geográfico...,
1845, tomo I, p. 83-.
Palabras previas, a modo de
introducción.
La Fuente Vieja de Ademuz es la más popular de las
fuentes de la localidad, cualquier vecino al que preguntemos sabrá decirnos
dónde está. Se trata de una fuente de siete caños, con pilón y abrevadero, que
forma un conjunto hidráulico con el lavadero público anexo que aprovechaba sus
aguas. En sus inmediaciones se halla el antiguo molino harinero de la villa,
inseparable del conjunto dada su proximidad y el elemento que les une.
La fuente está documentada desde mediados del siglo
XIX (1845), aunque Madoz la cita como “fuente del Molino” –refiriéndose sin
duda al molino de la villa-; de haber referencias más antiguas, las desconozco.
El aspecto actual del conjunto hidráulico, situado
en la margen derecha del Bohílgues (también, río de Vallanca), es resultado de
las intervenciones sufridas en los últimos años, aunque la fuente propiamente
ha debido cambiar poco en su aspecto externo –me refiero a su hechura, en cuyo
frontis luce una fecha: AÑO 1903-.
El Ayuntamiento de Ademuz colocó una placa en
conmemoración del primer centenario de la fuente (1903-2003), de forma que
sigue siendo un lugar emblemático, visita obligada para los que vienen a
Ademuz, se ha popularizado en los últimos años como lugar de casamiento para
algunas parejas.
Por encima de todo, el conjunto hidráulico se halla
en un paraje singular, a la vera del río de Vallanca y sombreado por un
monumental plátano (Platanus orientalis).
Vista frontal de la Fuente Vieja de Ademuz (Valencia), con detalle del frontis, los siete caños y el pilón (2018). |
Noticias históricas.
Decía arriba que las referencias más antiguas que
conozco son las de Pascual Madoz (1806-1870), político español progresista,
autor de un célebre Diccionario en dieciséis volúmenes (1845-1850). En
el tomo I (1845), al decir de Ademuz comenta que la villa se halla “sobre la
pendiente de un cerro” a la derecha del Turia y que la población la forman ocho
centenares de casas “de altura regular pero de pocas comodidades, distribuidas
en calles tortuosas, pendientes y mal empedradas”. Respecto a las aguas potables,
elogia su abundancia en las aldeas, al tiempo que explica que los vecinos de la
villa “se surten de la que brota por 4 caños de la fuente del Molino”.[1]
Cuando
dice de la “fuente del Molino” interpretamos que se refiere a la actual Fuente
Vieja, anexa al molino de la Villa, distinto del molino de Efrén (situado aguas arriba del Bohilgues), y del molino Nuevo (situado en la
entrada septentrional de Ademuz, aguas abajo del puente del Sotillo sobre el Turia). En su
tiempo, mediado el siglo XIX (1845), la “Fuente Vieja” tenía cuatro caños,
aunque hoy tiene siete.
Desconozco otras noticias antiguas respecto a la
“Fuente Vieja”, autores anteriores a Madoz, tales el botánico Cavanilles
(1745-1804) o el geógrafo Miñano (1779-1845), que toma muchos datos del
naturalista, no la mencionan en sus obras al decir de la villa.[2]
Es
de pensar, sin embargo, que la fuente ya existiría en tiempo de estos autores;
el hecho de no mencionar el manantial del que se abastecía la villa para su
consumo habitual puede explicarse porque no tenía nada de particular, considerando que había asuntos más
importantes que contar.
Entre los autores modernos que la nombran está el geógrafo Rodrigo Alfonso (1998), que la sitúa "a los pies de la población".[3]
Entre los autores modernos que la nombran está el geógrafo Rodrigo Alfonso (1998), que la sitúa "a los pies de la población".[3]
Asimismo,
resulta razonable pensar que la fuente del Molino fuera el nombre
primitivo del hontanar (dado que se hallaba junto al primer molino de la
Villa), y que el nombre de “Fuente Vieja” se le puso a posteriori, cuando se
fundaron otras fuentes en la villa, para distinguirla de las nuevas. La principal fuente nueva que se hizo en Ademuz en tiempos modernos se ubicó en un extremo de la plaza de la Iglesia (anteriormente, plaza de D. Blas Máñez), en relación con la traída del agua potable a la villa (1954), dicha fuente se colocó después en el frontis de Las Gradas de acceso al templo, como puede verse en la actualidad. Aquella primera fuente de la plaza se dispuso -aproximadamente- en el lugar donde estuvo el "copudo olmo" del que dice Madoz.[4]
Vista parcial (meridional) de Ademuz (Valencia), con detalle del comienzo de la carretera de Vallanca: kilómetro 0 de la CV-478 y visitantes de vuelta de la Fuente Vieja (2018). |
En busca de la Fuente Vieja
de Ademuz.
- <El presente itinerario recorre el Bohílgues, un curso fluvial con un importante patrimonio ambiental y paisajístico. La importancia de este río no se acaba aquí, fue también un elemento clave para numerosas actividades humanas que aún se puede reconocer en el paseo que recorre sus riberas./ El agua del Bohílgues y su entorno ha sido empleada tradicionalmente para el abastecimiento de la población de Ademuz. Además del agua de boca y consumo doméstico que proporcionaban fuentes como la de los siete caños o la de Jesús Manzano, sus aguas eran empleadas para hacer la colada en el lavadero y en establecimientos artesanales como la aguardentería que encontramos enfrente. La creación de una red pública de agua potable y fuentes en 1954 y su posterior ampliación a los hogares acabaron con estos usos./ El agua del Bohílgues también sirvió para mover maquinaria como las ruedas del Molino de la Villa y el Molino de Efrén y desde principios del siglo XX para producir electricidad. La primera generación de centrales se construyó río arriba (en Negrón y en Vallanca) en los años que van de 1914 a 1920, aunque el punto álgido de esta actividad se alcanzó en 1953 con la construcción de la central “Nuestra Señora del Milagro” que se mantuvo en funcionamiento hasta 1974./ La fertilidad de los sedimentos aportados por el Bohílgues y la abundancia de agua permitieron el desarrollo de una fértil vega cultivada que conocemos también en este itinerario. El regadío se sustenta en una compleja red de captación y distribución de caudales compuesta por una veintena de microsistemas. El Bohílgues al discurrir encajonado en una buena parte de su recorrido, causa frecuentes avenidas que pueden dañar cultivos y viviendas de sus riberas. Por ello, desde siempre se han desarrollado pequeñas obras de ingeniería civil como muros, diques... que junto a repoblaciones con especies de ribera, han permitido disminuir los riesgos>
Detalle de panel informativo junto al puente del río Bohilgues, en el acceso a la Fuente Vieja por el camino de la aguardentería (2018). |
- <El río ha sido también fuente de materiales para la construcción al aprovechar sus cantos para construir mampostería y sus áridos (arena, gravas...) para la elaboración de morteros y hormigones. La madera de los chopos de sus riberas también fue empleada frecuentemente por los albañiles locales. No se acaba aquí el uso de la flora de las riberas. La leña de todos los árboles era aprovechada como combustible; las varas de almeces y chopos se empleaban en la confección de mangos y bastones; la sarga era utilizada para cestería; el junco para cordelería y para el suelo de algunas viviendas y la anea para la cestería y respaldo de sillas.... Casi todos estos árboles y plantas eran aprovechados también para forraje y cama de animales y algunas especies, como la zarzamora, producían frutos que eran consumidos por los humanos. El río cuenta también con una abundante fauna en la que destaca la nutria y endemismos como la madrilla. Ésta, junto a otras especies como el barbo, la anguila o el cangrejo eran pescados y constituían una fuente de alimentos y variedad en la dieta para la población local. Hoy en día el Bohílgues se encuentra protegido por su riqueza natural, quedando la pesca restringida a ríos vecinos como el Turia>.
Detalle del panel relativo al Centro de Interpretación del Agua "Molino de la Villa" en Ademuz (Valencia), 2018. |
Tradicionalmente, las piedras, arenas y gravas del
río se han utilizado en la construcción de muros y edificios, de la misma forma
que la madera de los árboles de sus riberas. La leña se utilizaba también como
combustible, las varas del almezo para la fabricación de variedad de aperos
agrícolas (astiles, bastones, horcas...), las sargas en la cestería, los juncos
en cordelería, la anea para respaldo y asiento de sillas... Las ramas de
variedad de árboles y plantas se utilizaban como forraje y cama de animales,
otras tenían uso humano. Tampoco es de despreciar la abundante fauna vinculada
al río, como la nutria y la madrilla (Parachondrostoma miegii), pez endémico
del río. Junto a este pez endémico había otros (anguilas, barbos, cangrejos...)
que constituían fuente de aporte proteico a los habitantes de la zona. Dada su
particularidad y riqueza natural, la cuenca del río Bohílgues se encuentra hoy
protegida.
El
panel, patrocinado por el Ayuntamiento de Ademuz y la Diputación de Valencia
(Plan de Turismo de Interior), recoge una serie de recomendaciones útiles:
- Este es un itinerario sencillo que puede ser recorrido sin
necesidad de equipamiento especial. En todo caso es recomendable llevar
calzado adecuado y, en verano, sobre todo, agua y algún tipo de
recubrimiento para la cabeza.
- Las riberas del Bohílgues albergan un rico patrimonio natural y
cultural, es deber de todos preservarlo y mantenerlo para que pueda ser
disfrutado en el futuro.
- Si durante el trayecto se sufre cualquier tipo de percance se
puede llamar a lo siguientes teléfonos: Guardia Civil: 978782025.
Emergencias: 112
- También es interesante anotar los siguientes teléfonos:
Consultorio médico: 978785181 y 978785181 (Urgencias). Farmacia:
978785042. Ayuntamiento: 978782000
Vista parcial de la antigua aguardentería de Ademuz (Valencia), con detalle de la canal sobre el río Bohilgues al fondo (2018). |
Frente
al panel está el edificio de la antigua aguardentería, al fondo puede verse una
canal metálica que atraviesa el Bohilgues con dirección a la destilería.
Dejamos el lugar del panel, atravesamos el puente y ya en la ribera derecha
encontramos otro panel, éste con información relativa al Molino de la Villa:
CENTRO DE INTERPRETACIÓN DEL AGUA “MOLINO DE LA VILLA”. Junto a varias fotografía
del entorno hay un texto que dice:
- <El Centro de Interpretación del Agua de Ademuz nos ayuda a conocer mejor este recurso básico para la vida. En sus instalaciones se analiza este recurso esencial para la vida y la actividad económica desde diversos puntos de vista y haciendo incidencia en que se trata de un elemento cada vez más escaso y valioso. Así mismo, la exposición nos permite comprender como ha evolucionado la utilización del agua a lo largo del tiempo. Diversos materiales expositivos y audiovisuales, así como objetos, entre los que destaca el conjunto de maquinaria restaurada, permiten una completa aproximación al agua, a su vinculación con la sociedad y en general a las gentes de estas tierras./ La instalación se ubica en el Molino de la Villa, uno de los edificios más emblemáticos de Ademuz, cuyo origen se remonta a tiempos medievales. Esta localización permite comprobar la relación estrecha entre Ademuz y el agua y cómo este recurso ha sido aprovechado históricamente por sus habitantes. En el entorno del molino se asientan construcciones de diversa naturaleza, aunque todas ellas ligadas al agua y todavía en buen estado de conservación. De esta manera nuestro molino se inserta en un conjunto de gran valor cultural del que forman parte la Fuente Vieja, el lavadero, la aguardentería, la canal del molino.../ Frente al molino tiene su inicio el itinerario de la Hoz, un recorrido que llega hasta el paraje de la Veguilla, en los confines del término municipal de Ademuz. Seguir este camino nos permite disfrutar de un entorno privilegiado, un valioso patrimonio natural que ha sido reconocido como Lugar de Interés Comunitario de la Red Natura 2000. Junto a este valor ambiental podremos ver durante el recorrido un importantísimo patrimonio cultural vinculado al agua y sus usos y aprovechamientos>
Detalle de panel informativo: Centro de Interpretación del Agua "Molino de la Villa" en Ademuz (Valencia), 2018. |
En un ángulo del panel puede leerse más información:
- <Este centro se ha instalado en un edificio histórico. Por ello, te rogamos que respetes su importante valor patrimonial no causando ningún tipo de daño al edificio ni a los objetos y maquinaria que alberga./ El entorno del río Bohílgues está protegido por su elevado valor ambiental que permite que aquí pervivan especies que ya han desaparecido en otros lugres. Debemos disfrutar de sus riberas sin perjudicar la calidad de sus aguas ni dañar a las especies animales y vegetales que pueblan sus aguas y márgenes./ Ademuz dispone de un rico patrimonio histórico, cultura y natural. Si deseas conocerlo mejor, en el ayuntamiento te pueden proporcionar información adicional.>
Vista parcial del Molino de la Villa en Ademuz (Valencia), con detalle de antiguas piedras de molino (2018). |
Situados en este último panel veremos que a la derecha se
halla el Molino de la Villa, frente a una zona verde vallada en la que hay
varias ruedas del antiguo molino. A la izquierda se abre una placeta sombreada
por un monumental árbol de sombra, se trata propiamente del recinto de la
“Fuente Vieja”, situada a la derecha de la plazoleta y del Lavadero público,
ubicado poco más abajo.
Ubicación y descripción de
la fuente y el abrevadero.
La plazoleta en la que se halla el conjunto de la
fuente y el lavadero es un lugar agradable y sombreado, tiene el piso enlosado
y una baranda metálica separa el espacio del plátano oriental de la plazoleta.
El pavimento es obra reciente, antiguamente el piso se hallaba más hondo.
Vista de la placeta enlosada con la Fuente Vieja a la derecha y el lavadero al fondo en Ademuz (Valencia), 2018. |
Al acercarnos a la fuente vemos que en el piso de la
placeta -frente a la fuente- hay una placa de piedra labrada con una inscripción:
1er CENTENARIO/ DE LA FUENTE VIEJA/ 1903-2003/ AYUNTAMIENTO DE ADEMUZ/ A.C.R.A.
Propiamente, el manantial se halla a la derecha del
recinto, contra un viejo muro de mampostería ordinaria: pose frontis
triangular, basado en grandes piedras de sillería. En la pieza central figura un
recuadro con una inscripción: AÑO 1903. La fecha puede corresponder al año en que se actuó sobre la fuente, dándole el aspecto actual. En la parte baja hay siete caños de
metal de los que mana agua fresca y clara, que cae sobre una pila alargada.
Para bajar de la plazoleta a la fuente hay que descender dos escalones. A la derecha
de la fuente, contra el muro de piedra hay un abrevadero corrido en un plano
más elevado que el pilón de los caños. Pegado a la fuente se halla el sobradero del abrevador. A la izquierda de la fuente hay una
escultura de hierro -la silueta del Rincón de Ademuz en el centro de un corazón- dispuesta sobre un soporte de obra forrado de losas.
Vista frontal de la Fuente Vieja en Ademuz (Valencia), 2018. |
Detalle de placa frente a la Fuente Vieja en Ademuz (Valencia), en el Primer Centenario (1903-2003) del hontanar (2018). |
El agua de la fuente se canaliza por debajo del enlosado hacia el lavadero público, situado junto a la fuente, en un plano inferior. Lo habitual, sin embargo, es que el agua del pilón de la fuente pase al abrevadero, pero aquí no es posible, por hallarse éste en un plano más elevado. Ello lleva a pensar que el abrevadero se surtiría del agua molino, en vez de la fuente.
El lavadero público es un edificio exento situado
junto a la “Fuente Vieja”, con el acceso principal en la placeta y un poyo
corrido a ambos lados de la entrada. Su planta es cuadrangular, con muretes
laterales a media altura y columnas de obra enlucida. La armadura del tejado es
de tipo parhilera, típica de las cubiertas a dos aguas, basada en rodillos de
madera desbastados, con cañizo y grandes vigas laterales a modo de estribos. El
conjunto de la cobertura responde a la arquitectura vernácula, siendo quizá
lo más llamativo del lugar.
Entrando en el recinto del lavadero veremos que la
cobertura se soporta en las columnas cuadrangulares laterales, destaca una más
gruesa dispuesta en el centro y otra en la parte posterior, más fina. La parte
posterior está libre, sin murete. El lavadero propiamente está formado
por dos acequias o canales de obra que corren paralelas, una a cada lado, con
el piso a ras de la acequia, de forma que las mujeres (porque eran mujeres las
que tradicionalmente lavaban) tenían que hacerlo arrodilladas. Las canales
tenían usos distintos, la dispuesta a la izquierda (septentrional) era para
el fregado de los cacharros de cocina, mientras que la situada a la derecha
(meridional) se empleaba para la ropa. Los puestos de cabecera se utilizaban para el
aclarado de la ropa, ello puede explicar el hecho de que estos puestos tengan el área de lavado más desgastado, además de ser los más demandados.
Vista general (fronto-lateral izquierda) del lavadero público de Ademuz (Valencia), 2018. |
Vista interior del lavadero público de Ademuz (Valencia), con detalle de los canales o acequias de lavado (2018). |
Vista interior del lavadero público de Ademuz (Valencia), con detalle de la cobertura y canales de le lavado (2018). |
Vista de la placeta enlosada del conjunto hidráulico de Ademuz (Valencia), con la Fuente Vieja a la izquierda y el Molino de la Villa al fondo (2018). |
Respecto al lavado, cuando en una casa había alguien enfermo la mujer que lavaba esa ropa debía ponerse la última, en prevención de contagios. Desconozco si esta norma se seguía en Ademuz, pero así consta por testimonios que se hacía en el lavadero de Casas Altas, lo que hace pensar que tan elementales medidas higiénico-sanitarias fueran comunes a toda la comarca.
El lavadero tiene otra entrada en la parte
meridional, con tres peldaños de obra, estando abierta la fachada posterior
(suroriental). A la salida de las canales de lavado hay unas compuertas que
permiten desviar el agua para otros usos, como el riego, yendo a desaguar finalmente al
río Bohílgues.
El recinto del lavadero se restauró con acierto hace
unos años, respetando la fábrica original, de forma que constituye un
espacio singular y muy cuidado, paradigma de arquitectura tradicional.
Vista parcial del conjunto hidráulico de Ademuz (Valencia), con detalle de la Fuente Vieja a la derecha y el Lavadero al fondo (2018). |
Detalle de plátano oriental a la entrada del conjunto hidráulico de Ademuz (Valencia), la Fuente Vieja y el lavadero a la izquierda, el Molino de la Villa a la derecha (2018). |
Palabras finales, a modo de
epílogo.
La Fuente Vieja de Ademuz forma parte del conjunto hidráulico situado en la zona, compuesto por
el Molino de la Villa (antiguo Molino Real, de origen medieval), el abrevadero,
el lavadero público y la vieja aguardentería. Hay que reconocer que la rehabilitación del lavadero constituyó un acierto. Como escriben Fernando Vegas y Camila Mileto (2001), "se debería promover la restauración de estos edificios y no su destrucción para ser sustituidos por construcciones de nueva planta, que tanto empobrecen la cultura arquitectónica de los pueblos de la comarca".[6]
El antiguo molino harinero fue asimismo restaurado años
atrás, respetando los principios de la arquitectura vernacular; hoy es sede de la "Oficina Municipal de Información Turística", también
utilizado como sala de exposiciones y para charlas.
Con el paso de los años la Fuente ha tenido
distintos nombres, Madoz (1845) la denomina “fuente del Molino”, entonces tenía
cuatro caños; posteriormente, otros la nombran como “fuente de los Siete Caños”, en virtud del
número de caños del hontanar -que pudieron aumentarse en relación con el incremento poblacional: el municipio de Ademuz censaba 3.415 habitantes en 1900 y llegó a censar 4.092 habitantes en 1920-.[7] Hoy se la conoce como “Fuente Vieja” –nombre que
debió recibir para distinguirla de otra nueva, refiriéndose quizá a la primera que se puso en la plaza de la Iglesia.
El conjunto de la fuente, el abrevadero y el lavadero
público se hallan en torno a una placeta enlosada -situada en la margen derecha
del río Bohílgues-: un lugar de estar muy agradable, sombreado por un monumental
plátano oriental. No resulta extraño pues que algunas parejas de novios
utilicen el paraje para su casamiento civil.
Vista parcial (meridional) de Ademuz (Valencia), desde la ribera del río Bohilgues (2018). |
Cabe pensar que el lugar (la fuente, el abrevadero,
el lavadero público y el molino) debió ser un espacio de socialización muy
concurrido en tiempos subactuales, cuando las mujeres acudían a lavar la ropa y
a fregar los cacharros de cocina, los hombres a abrevar las caballerías y traer
talegas con trigo para moler, y las mozas por agua con cántaros y botijos
–también para ver y dejarse ver de los mozos. Entre los frecuentadores de la fuente estaban también los que
iban a echar un trago de agua y fumar un cigarro, a descansar un
rato y charlar.
El aspecto actual de la fuente procede de principios
del siglo XX (1903). Desde entonces hasta mediados los años cincuenta (1954),
momento en que tuvo lugar la traída de las aguas potables a la villa, el
manantial sirvió al abastecimiento del agua de boca y doméstico de sus
habitantes. En homenaje del hontanar, el Ayuntamiento mandó poner una placa en
su primer centenario reconocido. Vale.
Véase también:
[1] MADOZ,
Pascual (1845). Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y
sus posesiones de ultramar, Madrid, tomo I, pp. 82-83.
[2] CAVANILLES,
Antonio Josef (1797). Observaciones sobre la Historia Natural, Geografía,
Agricultura, Población y Frutos del Reyno de Valencia, Madrid, vol. II, párrafo
107-108, pp. 77-78. MIÑANO, Sebastián de (1826). Diccionario
Geográfico-Estadístico de España y Portugal [dedicado al Rey Nuestro
Señor por el doctor don Sebastián de Miñano, individuo de la Real Academia de
la Historia, y de la Sociedad de Geografía de París], Madrid, tomo I, pp.
20-21.
[3] RODRIGO ALFONSO, Carles (1998). El Rincón de Ademuz. Análisis geográfico comarcal, Edita Asociación para el Desarrollo Integral del Rincón de Ademuz (ADIRA), p. 29.
[4] MADOZ, 1845, tomo I, p. 82.
[5] Ibídem, p. 83.
[6] VEGAS, Fernando (2001). Arquitectura tradicional del Rincón de Ademuz. Memoria construida [Con ensayos de Camila Mileto y Marina Zuccolotto. Dibujos de los alumnos de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Valencia], Edición Grupo Loggia-Restauración, Valencia, p. 62. ISBN: 84-699-1838-5
[7] RODRIGO ALFONSO (1998), p. 54.
[4] MADOZ, 1845, tomo I, p. 82.
[5] Ibídem, p. 83.
[6] VEGAS, Fernando (2001). Arquitectura tradicional del Rincón de Ademuz. Memoria construida [Con ensayos de Camila Mileto y Marina Zuccolotto. Dibujos de los alumnos de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Valencia], Edición Grupo Loggia-Restauración, Valencia, p. 62. ISBN: 84-699-1838-5
[7] RODRIGO ALFONSO (1998), p. 54.
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